martes, 30 de agosto de 2016

Catedral de Mondoñedo

La catedral de Mondoñedo es, junto con la concatedral de Ferrol, una de las sedes episcopales de la diócesis de Mondoñedo-Ferrol, en Galicia. Recibe el sobrenombre de la "Catedral arrodillada" por sus perfectas proporciones y escasa altura. 

Fue declarada Monumento Nacional en 1902. El papa Juan XXIII, mediante una bula fechada el 9 de marzo de 1959 la nombro basílica. En 2015 junto con la catedral de Lugo, el monasterio de Sobrado y el camino primitivo fue declarado Patrimonio de la Humanidad.

En su interior se encuentra el museo catedralicio y diocesano "Santos San Cristóbal", fundado en 1969, que cuenta con importantes obras de arte religioso, siendo uno de los más importantes de Galicia en su género.



Origenes A mediados del siglo IX, un conjunto de monjes se asento junto al Cantábrico. Alfonso III de Asturias dio su beneplácito al asentamiento configurando en cierta forma la nueva diócesis. En 866, el obispado de Lugo cedió terrenos al norte de sus dominios, proximos al mar Cantábrico, dando origen a la diócesis mindonense y creándose el Monasterio de San Martín de Mondoñedo como sede de la misma .

Debido a su proximidad al mar y el peligro de incursiones de los pueblos del norte (normandos y vikingos), los obispos pensaron en la necesidad de trasladarse a tierras del interior. Los obispos de la sede mindonense consiguierón la autorización del papa y los reyes de trasladar la sede a la diócesis a la actual Mondoñedo alrededor del año 1112. Entonces se vio la necesidad de la construcción de una nueva sede catedralicia, la actual.



Caracteristicas y evolución histórica El templo de estilo románico con añadidos y reformas posteriores, se comenzó a construir en 1219 y en 1246 estaría avanzada la obra, aunque se concluyó durante los siglos XIII y XIV. La catedral en su estructura inicial tenía tres ábsides; el mayor y dos menores.


La catedral actual es un edificio de tres naves, con bóveda de cruceria sobre arcos apuntados. La fachada del templo se compone de tres grandes ojivas que corresponden con tres naves. La fachada occidental posee un rosetón del siglo XIV de 5 metros de diámetro con vidrieras policromadas. Está flanqueada por dos imponentes torres,  decoradas con motivos heráldicos.
En el interior se encuentra el Museo de arte sacro , disponiéndose sus obras en las naves laterales del templo. El retablo mayor actual obra de Fernando de Terán, es rococó, con columnas neoclásicas. Posee dos cuerpos, el primero con la Asunción de la Virgen y el segundo representando el misterio de la Santisima Trinidad.

Durante la Edad Media se construyó un coro de piedra que fue sustituido a principios del siglo XVI por uno de madera. En este siglo también se construyó la girola y finales del mismo la sacristía.

El claustro es del siglo XVII, de planta cuadrada con arcos de medio punto y columnas dóricas. Fue reconstruido por Diego Ibáñez Pacheco. 

En el siglo XVIII se remodeló la fachada y se añadieron las torres.



Estilos La catedral posee varios estilos debido a las sucesivas ampliaciones y reformas a lo largo del tiempo. Fue construida sobre bases románicas, aunque sufrió ampliaciones barrocas.

En la puerta principal y el ábside mayor se pueden ver sus origenes románicos. 

Por otro lado tanto el crucero y la sacristía son de estilo Gótico, asi como el rosetón de la fachada occidental. Las pinturas de la nave central situadas bajo los òrganos también se enmarcan en el Gótico. Entre estas pinturas cabe destacar la perteneciente a la escena de la Degollación de los Inocentes. La silleria del coro, tallada en madera de nogal, pertenecen igualmente a este estilo. 

El claustro,  reformado a principios del siglo XVII es de estilo clásico. En el centro existe un cruceiro gótico que probablemente pertenecía  al primitivo  claustro.



Mas Información


Mas Información




                                                                               

















lunes, 22 de agosto de 2016

Capilla de la Misericordia (Vivero)

La capilla de la Misericordia o capilla de Nuestra Señora de la Misericordia es un edificio religioso situado en la ciudad de Vivero, en la provincia de Lugo perteneciente a la parroquia de Santiago de Vivero. Se localiza a las afueras del núcleo de población, en el barrio a la que da su nombre, Misericordia, del otro lado de la ría de Vivero. Esta unida al centro urbano por medio del Puente de la Misericordia que recibe el nombre de dicha capilla.


La capilla Esta capilla pertenece al estilo renacentista; en su fachada principal se abren dos puertas y una ventana que termina en una espadaña. En el ático de tal fachada, tiene escudo cuartelado con los blasones de las familias Posadas, Pallares, Somoza y Alfeirán.



La planta de esta capilla es una nave con bóveda de medio cañón, dividida por dos arcos torales. Una reja separa del altar, cubierto por una hermosa cúpula decorada con fresco de San Antonio de Padua, y en el de la Epistola la imagen del Ecce-Homo de la Misericordia.



La construcción de la capilla de la Misericordia se debe al donativo realizado por parte de Don Rodrigo Alfonso Alfeirán, quién mediante escritura otorgada ante el escribano vivariense Miguel Galo, el 29 de julio de 1603, dispuso.




Que a Honra y Gloria de Dios Todopoderoso, Santisima Trinidad, Padre, Hijo Espiritu Santo, Trino y Personal y Uno en Esencia y de la Santisima Virgen Nuestra Señora y para aumento del Culto Divino y Devoción de los fieles Cristianos y sufragio de los fieles difuntos ordenaba fundar y fundaba con dedicación perpetua una ermita o capilla con titulo, y nombre de Santa Maria de la Misericordia, sita de la otra parte al cabo de la Puente de esta dicha Villa, en su propiedad, heredad y a su costa teniéndolo por bien y aprobándolo su Señoria Reverendisima Don Diego González Samaniego, Obispo Señor de Mondoñedo, del Consejo del Rey Nuestro Señor, debajo de cuya protección y amparo la ofrecia y dedicaba y consentimiento del Bachiller Alonso Fernández de Castro, Cura propio de la iglesia parroquial del Señor Santiago de esta Villa en cuyo distrito y feligresía está sita la dicha ermita y capilla...



El Ecce-Homo de la Misericordia Dentro del altar de la Epístola está situada la imgen del Ecce-Homo de la Misericordia, al que se rinde culto en toda la comarca. A esta imagen se le atribuyen numerosos sucesos milagrosos, en los cuales se fundó la devoción popular. El primer viernes de marzo llamado popularmente dia de las tres gracias, acuden los devotos de rodillas para pedirle favores.




Es conocida la tradición marinera en Vivero, tradición por la que el mundo del mar se vincula a esta capilla. Todos los barcos, al salir a faenar, elevan su última oración al salir del Puerto de Cillero dirigiendo la proa de la nave a la Capilla. Piden de tal modo la protección y la intercesión divina durante la diaria y dura tarea en la que ponen en peligro sus vidas. En tierra, patrones, armadores y marineros no dejan de pasar a agradecer la protección de la providencia.



Cofradias en la Capilla de la Misericordia Fue sede esta capilla de la Cofradia de Nuestra Señora, extinta en el siglo XIX. En 2006 se creó en esta capilla la Cofradia de la Misericordia, que participa en la Semana Santa de Vivero con su imagen titular, el Ecce-Homo de la Misericordia.   



Mas Información




                                                                                     
                                                                                   
                                                                                   
                                                                              
                                                                            
                                                                                 
                                                                              
                                                                               
                                                                            
                                                                                
                                                                                


                                                           

domingo, 21 de agosto de 2016

Monasterio de Santa Maria de Meira

Monasterio medieval del que se conserva la iglesia y parte de las edificaciones monásticas. Situado a unos 24 kilómetros de la ciudad de Lugo, en la parroquia de Meira perteneciente al municipio del mismo nombre.



Fundación Los fondos del archivo de Meira no conservan noticias de la carta fundacional de la casa. A pesar de esto se puede afirmar que su fundación fue fruto de la llegada al poder de Alfonso VII. El padre Yepes en su obra Crónica General de la Orden de San Benito, hace referencia a una noticia del año 997 que alude al monasterio pero se desconoce el origen de este dato. Además el padre Yepes, y a pesar de esta referencia, ubica la fundación del monasterio en el año 1142, equivocandose en solo un año del defendido por Manrique. Por otra parte M. Domínguez Casal sitúa la fundación de la casa entre los años 1151 y 1154, basándose en que en el año 1151 se documenta una concesión hecha por Alfonso VII al conde Álvaro Rodríguez de Sarria, dato que junto con otras donaciones del conde al monasterio hacen que esta autora defienda la fundación del monasterio por parte de este personaje. Otros autores persisten en discrepar en la fecha de fundación, como el profesor Lucas Álvarez, que opta por situar en el año 1144 la incorporación de la comunidad a la Orden del Císter y su fundación pocos años antes. 


De esta forma se puede considerar la fundación de este monasterio como un ejemplo más de las fundaciones familiares que fueron habituales en la época, aunque esta hipótesis no carece de interrogantes, y que hace pensar a otros autores de una fundación de origen regia.


Documentalmente la realidad es que el primer documento que se refiere a este monasterio data del año 1154.


 Descripción De los edificios conventuales en la actualidad sólo se conserva la iglesia. Construida en el austero estilo cistercense fue consagrada el 3 de julio de 1258 por el obispo Martín de Lugo. 


El monasterio desde sus inicios realizó actividades económicas a través de las tres formas clásicas donacione, compraventas y cambios. La mayor parte de ellas fueron hechas hasta el año 1350, pudiéndose señalar hasta 446 donaciones y 180 compras, que representan el 81% del total de las adquisiciones documentadas.


Mas Información



                                                                                        
                                                                                 
 
                                                                                  
                                                                                    

sábado, 20 de agosto de 2016

Monasterio de Nuestra Señora de Valdeflores

El Monasterio de Nuestra Señora de Valdeflores, es un monasterio situado en la parroquia de Magazos, en las afueras de la ciudad lucense de Vivero. Este edificio religioso está regido por una congregación de dominicas. La fundación de este convento se remonta al siglo XV. La iglesia, también es del siglo XV, de estilo gótico, momento también al que corresponde la talla de la Virgen de Valdeflores la cual se venera en este templo. Esta imagen, según cuenta la tradición fue encontrada en los terrenos sobre los que se levanta el monasterio. El edificio del monasterio es de finales del siglo XVII.



Mas Información







                                                                                   


 
                                                                                


                                                                              








                                          

jueves, 18 de agosto de 2016

Monasterio de San Salvador de Villanueva (Lorenzana)

El antiguo monasterio de San Salvador de Villanueva se encuentra en la localidad de Lorenzana del concejo de Villanueva en el valle del río Masma, a pocos kilómetros de Mondoñedo. Se considera fundador del monasterio al conde Osorio Gutiérrez (el conde santo) que lo amplio y protegió y actuó como mecenas, sobre un pequeño cenobio apenas sin vida. El complejo arquitectónico fue cambiando a través de los siglos y las modas constructivas, de manera que el edificío último data del siglo XVII en estilo barroco, Es la actual sede del Ayuntamiento.

Declarado monumento histórico-artístico en el año 1974



Historia El principal mecenas e impulsor del monasterio fue el conde Osorio Gutiérrez, conocido como el conde santo. Este personaje altomedieval, perteneciente a la nobleza condal, recibió una herencia de su padre Gutiérrez Osóriz y de su tío Nuño Osóriz, que tenían amplias posesiones en la región gallega de Mondoñedo. Partió desde Tierra de Campos hasta la localidad de Lorenzana, donde se ocupó de dotar el monasterio con tierras y posesiones de su herencia. El 17 de junio de 969 se firmó la carta de fundación. El monasterio estaba bajo la observancia de la regla de San Benito. Cuando el conde enviudó ingresó en la comunidad de monjes de este monasterio. Siendo ya de edad avanzada viajó como peregrino a Tierra Santa de donde se dice que trajo su propio sarcófago. Al poco tiempo de su regreso, el conde Osorio murio y fue enterrado en este lugar.

En 1835 el monasterio sufrió las consecuencias de la desamortización de Mendizabal, desapareciendo el monasterio como tal y siendo desmantelada su biblioteca. Ademas, años más tarde, en 1878, hubo un importante incendio que destruyo gran parte del claustro mayor. En 1910 llegó al cenobio una comunidad de monjes que creó un priorato dependiente del monasterio de Samos. Estos nuevos huéspedes restauraron las partes abrasadas, retejando y embelleciendo el jardin del claustro. En 1942 la comunidad se disgrego, quedando el monasterio a disposición del obispado de Mondoñedo que lo dedicó a Seminario Menor  Diocesano hasta 1970. Después se hizo cargo del complejo el Ayuntamiento, que tiene en él su sede.



El monasterio En origen en tiempos de su fundador el conde Osorio sería un pequeño cenobio que se iría trasformando con el tiempo, aunque de esas transformaciones no ha quedado ningún vestigio arquitectónico, ni del románico ni del gótico. Fue en el siglo XVII cuando se hicieron las mayores modificaciones.



Entre 1637 y 1650 tuvo lugar la construcción del claustro mayor obra de Juan de Villanueva. Consta de cinco arcos en cada panda, separados por pilastras dóricas. En 1644 el maestro de obras fray Benito Escobar contrató al maestro cantero Domingo de Castro para edificar los arcos, pilastras y antepechos del espacio conocido como el Mirador, correspondiente a una parte del monasterio desconocida en la actualidad.



Entre 1648 y 1650 figura en los libros como maestro principal de las obras que se vinieron haciendo, Francisco López Rosillo. Es en este tiempo cuando se hace la fachada en ángulo recto con la iglesia. La parte principal que sirve de entrada tiene dos cuerpos flanqueados por columnas que descansan sobre ménsulas muy sobresalientes. La puerta de acceso esta limitada por un arco deprimido. El segundo cuerpo presenta un gran balcón con barandillas de hierro. El muro que rodea la puerta tiene decoración de almohadillado. Se remata el conjunto con un frontón barroco semicircular en cuyo centro puede verse un escudo que lleva las armas del conde Osorio.



 A lo largo del ala de la fachada se abre una serie de ventanas separadas por pilastras adosadas que refuerzan el muro, rematadas por pináculos con forma de obelisco.  En el interior del edificio se conserva la escalera que daba acceso desde la porteria a la cámara abaical, biblioteca y otras dependencias.



Tiene dos claustros, el principal que es  barroco y muy austero y el claustro menor donde se encuentra el Pozo do Santo. Se decia que sus aguas eran milagrosas y curativas y fue costumbre establecida por los peregrinos sacarla para beber o para llevarla consigo en algún recipiente.




La Iglesia  La iglesia que puede verse en estos tiempos se construyó en la etapa de esplendor barroco, modificandose totalmente el edificio anterior; se inicio en 1735 siguiendo las trazas del monje Juan Vázquez de Samos,  que después alteró Fernando de Casas  y Novoa, diseñando además la fachada y dirigiendo las obras de las naves hasta el crucero. Es de piedra de granito procedente de Burela.  Se conoce el proceso de construcción gracias al manuscrito conservado en el propio monasterio, escrito por fray Benito Ponte. El edificio tiene planta de cruz latina, tres naves y cúpula sobre el crucero. La nave central es ancha y luminosa y en sus laterales se abren pequeñas capillas para el culto.

Se considera la fachada como un precedente de la fachada de la catedral de Santiago de Compostela. La portada es de tres cuerpos y a los lados se alzan las dos torres (la del lateral suroeste esta sin terminar). El primer cuerpo tiene cuatro grandes columnas, dos a cada lado de la puerta. En los intercolumnios se hallan las esculturas de San Benito, y Santa Escolástica, y Asunción sobre la puerta. En el segundo cuerpo, en un hueco limitado por columnas se ve la estatua del Salvador. El tercer cuerpo lo ocupa una ventana rectangular con frontón curvo y columnas a los lados. Sobre el tercer cuerpo se levanta el remate que consta de una hornacina donde se guarda la imagen del conde santo vestido de peregrino palmero. Por encima hay un frontón curvo y sobre el, la imagen de la Fe.

La sacristía contiene un magnífico relicario, obra del siglo XVII, con bustos en madera policromada representando cada uno a un santo y conteniendo en su interior la reliquia correspondiente.



Retablo mayor Es neoclásico y su autor, Ventura Rodriguez. Consta de banco, un solo cuerpo y tres calles separadas por columnas de dos en dos estriadas y que rematan en capiteles corintios. Sobre las columnas descansa un friso muy decorado con guirnaldas y cabezas de angelitos y sobre él  un frontón triangular en cuyo vértice puede verse la figura de Dios Padre rodeado de angeles. En el centro del retablo está la imagen del titular, es decir el Salvador, con Pedro y Pablo a sus costados. Toda la estructura fue pintada y dorada por Juan Bernardo del Rio en 1789.



Capilla de Nuestra Señora de Valdeflores La importancia de esta capilla radica en que contiene el sarcófago donde está sepultado el conde Osorio. El sarcófago es una pieza hecha de un mármol muy especial entre jaspe blanco y cárdeno con vetas azules. Por el frontal y por los costados tiene una decoración geométrica muy sencilla y en el centro se ve labrado un crismón. Se apoya sobre unas robustas columnas cuadradas y muy decoradas. Se cree que vino de Oriente y alrededor de esta procedencia se desarrollo una leyenda muy parecida a la traslación del cuerpo de Santiago Apostol a las costas gallegas. La inventio dice que el sarcófago lo compro el conde Osorio en su peregrinar a Tierra Santa y lo hizo depositar sobre aguas del mar, de esta manera llegó a la costa.



Los peregrinos que acudían al monasterio imploraban protección al conde santo, aun despúes de haber muerto. Rezaban una oración ante el sepulcro al tiempo que introduccian los dedos por los orificios de la parte inferior, hasta tocar la caja de madera donde descansaba el cuerpo. Las gentes de estas tierras consideraban al conde su señor y protector, tanto en la vida como en la muerte.    

Mas Información


Mas Información




                                                                                
                                                                                   
                                                                                  
                                                                          












martes, 16 de agosto de 2016

Monasterio de San Julián de Samos

El monasterio de San Julián de Samos fundado en el siglo VI pertenece a la orden de los benedictinos y está en el municipio del mismo nombre, en Lugo.

El monasterio fue colegio de Teologia y Filosofia y es parada importante del Camino de Santiago, ya que cuenta con una hospederia. 




Historia La fundación se atribuye a San Martin Dumiense. Se sabe que fue renovado por San Francisco en el siglo VII, aunque el primer escrito que lo menciona es del año 665: una inscripción en los muros del claustro de la porteria que dice que fue reconstruido por el obispo de Lugo Ermefredo. Despues de esta restauración fue abandonado ante la invasión musulmana y hasta la reconquista del rey Fruela I de Asturias ( alrededor de 760). Cuando años más tarde este fue asesinado encontraron refugio en él su viuda e hijo, el futuro Alfonso II de Asturias, el Casto. Con esto ganó  la protección real comenzando por las propiedades en media mílla a la redonda que propiciaría su crecimiento.

A comienzos del siglo X, el obispo de Lugo, don Ero, intentó hacerse con su control y expulso a los monjes. Los condes Arías Menéndez y Gutierrez Menéndez  hijos de Hermenegildo Gutierrez fueron requerídos para repoblar el monasterio con nuevos monjes; a partir de entonces hay muy buenas relaciones entre el monasterio y esta familia condal. En el mismo siglo fue reocupado a instancias del rey Ordoño II de León y desde 960 la comunidad vivió bajo la regla de San Benito aunque en el siglo XII se sumó a la reforma cluniacense con el obispo don Juan. El monasterio de Samos disfrutó de gran importancia durante la Edad Media, lo que se refleja en que poseía doscientas villas y quinientos lugares En 1558, incorporado ya San Benito el Real de Valladolid, sufrió un incendio que obligó su total reedificación. La comunidad fue exclaustrada en 1836, con la desamortización de Mendizábal, pero los monjes benedictinos regresaron en 1880.

Sufrió otro incendio en 1951, tras el cual fue nuevamente reconstruido.


Descripción Se encuentran varios estilos arquitectónicos: gótico, tardío, renacentista y barroco.

La iglesia  La iglesia abacial, barroca, fue construida entre 1734 y 1748. Tiene planta de cruz latina y tres naves. El interior es luminoso y solemne. La bóveda está iluminada por ocho óculos y las pinturas de los cuatro doctores marianos benedictinos (Anselmo, Bernardo, Ildefonso y Ruperto). El retablo mayor también es clasicista y tiene una imagen del patrón del monasterio, San Julian, obra de Jose Ferreiro. La fachada,  barroca, va precedida de una escalinata en forma de lazo que recuerda la del Obradoiro. Esta dividida en dos cuerpos, con una puerta flanqueada por cuatro columnas dóricas sobre pedestales, que se repiten en el cuerpo superior flanqueando el óculo. La sacristía de finales del XVIII, tiene en una bóveda de planta octogonal apoyada en arcos de medio punto.

La gran biblioteca, de 31 m de largo, consiste en unos 25.000 volúmenes, inclusos varios incunables y otros documentos de valor histórico.


Los claustros

Hay dos claustros: El Claustro Grande fue construido entre 1685 y 1689 y tiene 3.000m2 (54m. de lado) . por lo que es el mayor de España. Se conoce como "del Padre Feijoo", por haber tomado éste el hábito benedictino en este monasterio en 1690, y está presidido por una estatua suya, obra de Francisco Asorey, de 1947. El estilo es una combinación austera y sencilla de clasicismo y herrerianismo : nueve arcos de medio punto por cada lado en la planta baja, columnas dóricas en las dos primeras plantas y jónicas en los ventanales de la tercera. Los muros del piso superior fueron decorados con escenas de la vida de San Benito y son obra de Enrique Navarro, Celia Cortés y Jose Luis Rodríguez.

El Claustro Pequeño o " de las Nereidas" fue construido entre 1539 y 1582 gracias al monfortino Pedro Rodríguez, cuyo nombre aparece en una de las claves de la banda sudoeste. Imita el estilo gótico y cuenta con curiosos motivos de decoración, como la inscripción humoristica "¿Que miras, bobo?" en una clave. El centro del claustro lo ocupa la fuente barroca de las Nereidas de comienzos del siglo XVIII.

La Capilla del Ciprés 

Esta pequeña capilla dedicada a San Salvador es una sencilla obra de finales del siglo IX de estilo mozárabe. Su planta es ligeramente trapezoidal en el que se distinguen dos cuerpos, nave y pequeña cabecera, y una única puerta de acceso.


Mas Información